Sunday, September 27, 2015

Unidad II: Higiene aplicada a la Educacion Fisica

Higiene Corporal: Es el cuidado y limpieza del cuerpo para mantenerlo saludable y libre de infecciones por fuera y por dentro.
La higiene corporal debe ser la siguiente:


Higiene de la piel:
Se realiza para eliminar el polvo y otras sustancias, sudor y células descamadas y el mal olor, así como favorecer la transpiración, evitando focos de infección y consiguiendo una mejor aceptación social. 

Higiene de las manos:
Debemos prestar especial cuidado, ya que es con ellas con las que realizamos la mayor parte de las actividades diarias. Es muy importante que: Se laven bien antes de las comidas. Es importante el cuidado de las uñas y su lavado con un cepillo especial. Además de estar limpias, las uñas de las manos han de ser cortadas con regularidad. Se deben cortar siguiendo la curvatura de la yema del dedo.

Higiene de los pies:
La higiene de los pies en el ámbito físico-deportivo ha sido posiblemente el elemento más difundido en la higiene corporal, por el elevado riesgo de contraer enfermedades íntimamente relacionadas con los mismos y con la práctica de actividad física. Ello es debido a la escasa ventilación que existen en los mismos (dado que casi siempre van calzados) lo que condiciona secreciones y un aumento muy grande de la humedad, lo que permite una proliferación de gérmenes muy alta y, por tanto, la aparición de hongos.
Las normas de limpieza son similares a las de las manos, debiéndose de cuidar mucho el correcto secado (entre los dedos de los pies hay que prestar especial atención, ya que la humedad nos puede provocar la maceración de la piel y provocarnos heridas) y el cortar las uñas frecuentemente en forma recta.

Higiene del cabello:
La higiene del cabello es importante para la eliminación de suciedad, el exceso de grasa y la caspa. Se recomienda el lavado al menos dos veces por semana con champú neutro, que debe realizarse con la yema de los dedos, sin utilizar las uñas, teniéndose que cuidar mucho el enjuagado del mismo.

Higiene de la cara
En la cara encontramos partes físicas importantes en nuestra vida diaria y tenemos que prestarles atención:
Los ojos: es recomendable realizar lavados de arrastre con agua.
Las orejas: en la higiene de las orejas sólo se deben usar bastoncillos para el pabellón auditivo, nunca para el oído. Lo que haríamos sería arrastrar hacia dentro parte del cerumen que segrega, produciéndose así un “tapón de oído”. Si nos hurgamos en las orejas con las manos sucias podemos provocarnos una infección de oído. Para su higiene es recomendable utilizar el pico de una toalla húmeda.

Higiene de los genitales:
Es una de las zonas que requieren mayor cuidado. Así, la alta producción de sudor durante la práctica de actividad física condiciona su limpiado siempre que se termine su realización y un cambio de ropa interior inmediata. A ello hay que unirle la limpieza correcta de los pliegues cutáneos, separando adecuadamente los labios mayores de la vulva de la mujer y la piel del prepucio en el hombre. En el caso de la primera, la higiene debe intensificarse en la fase menstrual. En ambos sexos, es recomendable una adecuada higiene tras la micción y la defecación.

Higiene buco-dental:
Es importante cuidarla desde pequeños y hacer de la higiene bucodental un hábito y no una obligación. Hay tres medidas básicas a tener en cuenta. En primer lugar, controlar la ingesta de azúcares. En segundo lugar, una adecuada higiene oral, haciendo especial hincapié en el cepillado, acompañándose temporalmente de enjuagues bucales con locutorios para tal finalidad. Y en tercer lugar, utilización adecuada de del flúor, para aumentar la resistencia del diente gracias al fortalecimiento del esmalte dental.



Sistema Musculo Esqueletico: 
Es el que permite al ser humano o a los animales en general interactuar con el medio que le rodea mediante el movimiento o locomoción y sirve de sostén y protección al resto de órganos del cuerpo.

Está formado por el sistema osteoarticular (huesos, articulaciones y ligamentos) y el sistema muscular (músculos y tendones que unen los huesos). Este no es independiente, pues es un conjunto integrado con diversos sistemas, por ejemplo, con el sistema nervioso para la generación y modulación de las órdenes motoras. Este sistema está formado por las estructuras encargadas de sostener y originar los movimientos del cuerpo y lo constituyen dos sistemas.
Sistema óseo: Es el elemento pasivo, está formado por los huesos, los cartílagos y los ligamentos articulares.
Sistema muscular: Formado por los músculos los cuales se unen a los huesos y por lo tanto al contraerse provocan el movimiento del cuerpo.
Además de estos, hay que agregar el sistema nervioso, ya que este es el responsable de la coordinación y la estimulación de los músculos para producir el movimiento.

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Sistema Cardio Respiratorio:
Nuestras células son las que realizan todas las funciones del organismo y las que crean todas sus estructuras.


Todas las células de nuestro cuerpo necesitan vivir rodeadas de líquido para poder llevar a cabo sus funciones. A este líquido se le llama medio interno. Este medio interno no solo ha de nutrir las células sino permitir que se comuniquen, defenderlas, eliminar desechos, etc. La mayor parte de este medio interno se mueve lentamente entre las células; el llamado líquido tisular. Otra parte se mueve (circula) a mucha mayor velocidad. A este líquido circulante se le denomina sangre y el conjunto de órganos que consiguen este movimiento es el sistema circulatorio (su nombre se debe a que el líquido realiza siempre el mismo recorrido) o sistema cardiovascular (nombre debido a que está implicado el corazón y los vasos sanguíneos). Hay otros líquidos internos a parte del líquido tisular y la sangre. El más relevante es la linfa.
El líquido tisular se mueve alrededor de las células, aportando nutrientes y recogiendo sustancias de desecho. Este líquido tisular sale y entra de los vasos sanguíneos (estamos a nivel capilar, donde de este modo, se realiza un intercambio de sustancias). A su vez, de los vasos sanguíneos sale gran parte de líquido, que no puede volver a entrar debido a la presión que existe dentro del vaso. Ese exceso de líquido es recogido por los vasos linfáticos, que en un momento dado lo vierte de nuevo en el sistema circulatorio.

Por otra parte, el sistema circulatorio humano es cerrado y el líquido circulatorio no se mezcla con el líquido tisular, excepto a nivel de los capilares, cuyas paredes son muy finas y la circulación sanguínea se ralentiza para facilitar el intercambio de sustancias.
El aparato circulatorio tiene la misión de distribuir el líquido circulatorio (sangre) por todo el cuerpo. Esta circulación es necesaria para:
-Reparto de sustancias por el cuerpo
-Regulación de la temperatura corporal
-Otros procesos

En el sistema circulatorio humano intervienen los siguientes elementos:
-Sangre: Compuesto de 55% de plasma y 45% de celulas sanguineas (leucocitos y eritrocitos)
-Vasos sanguineos: Es por donde circula la sangre, hay tres tipos: arterias, venas y capilares.
-Corazon: Es el motor de todo el sistema.



Recorrido general del sistema circulatorio:
Existen dos circuitos: La circulación menor, donde la sangre va y regresa de los pulmones, y la circulación mayor, donde la sangre va y regresa del resto del cuerpo.

Nuestro organismo tiene unos requerimientos prioritarios, y uno de ellos es abastecer a todas las células de oxígeno. Por ello, la sangre tiene que pasar siempre por los pulmones en cada recorrido (circulación menor). Una vez bien oxigenada, la sangre recorre el resto del cuerpo (circulación mayor). Al llegar a diferentes órganos, la sangre:

-Filtra los desechos cuando pasa por el riñón.

-Recoge los nutrientes absorbidos por el intestino cuando pasa por este órgano.

-Recoge diversas hormonas cuando pasa por glándulas endocrinas.

-Cede nutrientes y oxígeno y recoge sustancias de desecho y dióxido de carbono en todos los órganos y tejidos.

Participación y adaptación del sistema cardiovascular según la intensidad del ejercicio físico:
Todo el sistema cardiovascular se adapta al ejercicio que se realice. En individuos sedentarios se vuelve más frágil y es más propenso a sufrir enfermedades. Las principales adaptaciones son:

-Mayor riego sanguíneo en órganos más activos. En tejidos u órganos con más demanda energética se desarrolla más el sistema de vasos sanguíneos:
-Mayor luz de venas y arterias.
-Mayor cantidad y densidad de capilares sanguíneos.

Disminución del ritmo cardiaco. En personas entrenadas, el ritmo cardiaco es menor que las no entrenadas, tanto en reposo como durante el ejercicio.

Disminución de la tensión arterial. En personas entrenadas, la tensión arterial es más baja en reposo y aumenta más lentamente durante el ejercicio que en personas sedentarias.

Vasos más robustos. Las venas y arterias son más robustas en sujetos activos físicamente. Se refuerzan capas musculares y conjuntivas.

Corazón más grande, con mayor volumen y más potente. La capacidad de las cavidades cardiacas aumenta. La masa de músculo cardiaco y el volumen sistólico se incrementan, es decir, se bombea más sangre por latido.
Un corazón en actividad física intensa puede consumir de 4 a 6 veces más que en reposo, por lo que las probabilidades de que haga uso de un metabolismo anaerobio en un momento dado se incrementan. Por ello es necesario un calentamiento previo al ejercicio, para asegurarnos de que haremos uso del metabolismo aeróbico y que llegará oxígeno a todos los órganos y tejidos de nuestro cuerpo, en especial al corazón.



Sistema Nervioso:
Es un conjunto de organos y una red de tejidos nerviosos cuya unidad básica son las neuronas. Las neuronas se disponen dentro de una armazón con células no nerviosas, las que en conjunto se llaman neuroglia.
El sistema nervioso tiene tres funciones básicas: la sensitiva, la integradora y la motora.
La función sensitiva le permite reaccionar ante estímulos provenientes tanto desde el interior del organismo como desde el medio exterior.
Luego, la información sensitiva se analiza, se almacenan algunos aspectos de ésta y toma decisiones con respecto a la conducta a seguir; esta es la función integradora.
Por último, puede responder a los estímulos iniciando contracciones musculares o secreciones glandulares; es la función motora.

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Para entender su funcionalidad, el sistema nervioso como un todo puede subdivirse en dos sistemas: el sistema nervioso central (SNC) y el sistema nervioso periférico (SNP).

El SNC está conectado con los receptores sensitivos, los músculos y las glándulas de las zonas periféricas del organismo a través del SNP.
Este último está formado por los nervios craneales, que nacen en el encéfalo y los nervios raquídeos o medulares, que nacen en la médula espinal. Una parte de estos nervios lleva impulsos nerviosos hasta el SNC, mientras que otras partes transportan los impulsos que salen del SNC.
El componente aferente del SNP son células nerviosas llamadas neuronas sensitivas o aferentes. Conducen los impulsos nerviosos desde los receptores sensitivos de varias partes del organismo hasta el SNC y acaban en el interior de éste. El componente eferente son células nerviosas llamadas neuronas motoras o eferentes. Estas se originan en el interior del SNC y conducen los impulsos nerviosos desde éste a los músculos y las glándulas.

El sistema nervioso central está formado por el encéfalo, que comprende el cerebro, cerebelo, la lámina cuadrigémina (con los tuberculos cuadrigéminos) y el tronco del encéfalo o bulbo raquídeo, y por la médula espinal. Los tubérculos cuadrigéminos constituyen un centro de reflejos visuales. Los tubérculos son cuatro y se dividen en dos superiores y dos inferiores. En la región interior de dichos tubérculos se encuentra la glándula hipófisis, alojada en la "silla turca" del hueso esfenoides y que controla la actividad del organismo.

Funcionalmente, el sistema nervioso periférico se divide en:
-Sistema nervioso somático
-Sistema nervioso vegetativo o autónomo.

El sistema nervioso somático está compuesto por:
-Nervios espinales, 31 pares de nervios que envían información sensorial (tacto, dolor) del tronco y las extremidades hacia el sistema nervioso central a través de la médula espinal. También envían información de la posición y el estado de la musculatura y las articulaciones del tronco y las articulaciones para el control de la musculatura esquelética.
-Nervios craneales, 12 pares de nervios que envían información sensorial procedente del cuello y la cabeza hacia el sistema nervioso central. Reciben órdenes motoras para el control de la musculatura esquelética del cuello y la cabeza.

El sistema nervioso vegetativo o autónomo se compone de centros bulbares y medulares, así como de dos cadenas de 23 ganglios situados a ambos lados de la médula espinal, y preside las funciones de respiración, circulación, secreciones y en general todas las propias de la vida de nutrición. Los órganos inervados funcionan con entera independencia de nuestra voluntad; por esto se les llama sistema autónomo.
Atendiendo al origen y función de las fibras nerviosas el sistema nervioso autónomo se divide en dos grandes grupos:
-Sistema Nervioso Simpático: sus fibras se originan en la médula dorsolumbar y su función es descargar energía para satisfacer objetivos vitales.
-Sistema Nervioso Parasimpático: sus fibras nacen en los centros bulbares y sacro e interviene en los procesos de recuperación, se encarga del almacenamiento y administración de la energía.

Ambos sistemas tienen funciones antagónicas y complementarias. El nervio más importante del sistema parasimpático se llama neumogástrico y sale del bulbo raquídeo.

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